Crítica a "La Sustancia": ¿Una mutación del cine de terror o un simple calco?
Coralie Fargeat, directora de la perturbadora Revenge, regresa con La Sustancia, una cinta que promete llevarnos a un viaje oscuro y visceral por los abismos de la vanidad y la obsesión por la juventud.
Pero, ¿cumple con las expectativas?
Una premisa sustancial
La premisa de La Sustancia es intrigante: una actriz envejecida descubre una sustancia que le permite rejuvenecer, pero con consecuencias nefastas. Esta premisa, que toca temas como la belleza, la identidad y la obsolescencia, tiene un gran potencial.
Demi Moore, un rostro familiar en un papel complejo
Una estética visual impactante pero desigual
La película cuenta con una estética visual llamativa y cuidada, con una paleta de colores saturada y una fotografía que busca crear una atmósfera de irrealidad. Sin embargo, en algunos momentos, esta estética se siente excesiva y distrae al espectador.
Un guion que promete más de lo que ofrece
El guion del film plantea interesantes interrogantes sobre la naturaleza de la identidad y la obsesión por la juventud, pero no logra profundizar en estos temas de manera satisfactoria. Además, el final resulta excesivamente gore y gratuito, desaprovechando el potencial de la historia.
¿Una secuela innecesaria o una evolución?
Comparando La Sustancia con Revenge, se puede apreciar una evolución en la dirección de Fargeat, que demuestra un mayor dominio de los recursos cinematográficos además de claras referencias al cine de Hitchcock o Kubrick. Sin embargo, la película también muestra algunos de los mismos problemas que su predecesora, como una cierta tendencia al exceso y una falta de sutileza.
En conclusión, «La Sustancia» es una película que divide opiniones. Si eres fan del cine de terror gore y te gustan las historias con una estética visual impactante, es posible que disfrutes de esta película.
Sin embargo, si buscas una historia más profunda y compleja, es probable que te sientas decepcionado.
En resumen:
- Lo mejor: La actuación de Demi Moore, la estética visual y la premisa inicial.
- Lo peor: Un guion que no profundiza en los temas planteados, un final excesivamente gore y una cierta sensación de déjà vu.